Pobreza de aprendizaje aumentará en Latinoamérica
Según estimaciones del Banco Mundial, la cantidad de estudiantes latinoamericanos de 10 años que no puede leer ni entender un texto simple aumentará a causa de la pandemia.
La pandemia de covid-19 dejará a América Latina con una mayor pobreza de aprendizaje, revela un estudio del Banco Mundial (BM), retomado ayer durante un foro de la Fundación Dr. Guillermo Manuel Ungo (FUNDAUNGO).
El estudio "Actuemos ya para proteger el capital humano de nuestro niños", publicado en marzo, estima que la pobreza de aprendizaje en la región aumentará 11.5 puntos porcentuales respecto a 2018 y este incremento se atribuye al covid-19.
Según el estudio, en 2018 se estimó que el 51 % de la niñez latinoamericana no podía leer ni entender un texto simple a los 10 años. Tomando en cuenta el cierre de escuelas y las medidas de mitigación implementadas durante la pandemia, ese porcentaje podría llegar al 62.5% en un escenario intermedio, 11.5 puntos porcentuales más que en 2018.
América Latina sería la región con el segundo mayor aumento absoluto en pobreza de aprendizaje, ya que estas condiciones se reflejarán en 7.6 millones de niños.
El impacto del covid-19 en la pobreza de aprendizaje se midió con tres escenarios. Pero incluso el optimista arroja cifras alarmantes. "Aun cuando estuviéramos en un escenario optimista, un aumento del 3.1 % en (pobreza de) aprendizaje es muy alto", dijo Magdalena Bendini, especialista del BM.
Bendini mencionó el caso de El Salvador, donde se adoptó un modelo híbrido de educación por la vulnerabilidad a los brotes de covid-19. La especialista explicó que, a pesar de los esfuerzos, la continuidad educativa ha sido difícil durante este 2021 para toda América Latina.
En junio de este año, LA PRENSA GRÁFICA publicó que, según este mismo estudio del Banco Mundial, los estudiantes salvadoreños ganarían sólo 6.1 años de aprendizaje durante su paso por las escuelas, lo que significa un 1.5 años menos que en la etapa anterior a la pandemia. Esto debido al cierre de las escuelas y el acceso desigual a recursos para garantizar una educación a distancia de calidad.
En este sentido, para enfrentar la crisis de la pandemia, el estudio hace un llamado a proteger la salud y la seguridad, como también mitigar la pérdida del aprendizaje y prevenir el abandono escolar, mientras los centros escolares están cerrados.
